Bion propone
en “Aprendiendo
de la Experiencia” (1962b) que existen tres registros humanos básicos que
determinan vínculos característicos: Amor, Odio y Conocimiento (L, H y K,
respectivamente, por sus siglas en inglés). Y los define de manera bastante
clara:
1. Amor (L): Amor es siempre amor por los hechos tal cual son. El vínculo
L implica un contacto no deformado con los hechos que contemple las
características propias del objeto sin homogenizarlo ni amalgamarlo.
2. Odio (H): Odio es odio a la verdad de lo que los hechos son por mérito
propio. H permite que el objeto sea desconocido.
3. Conocimiento (K): Este es el vínculo más profundamente estudiado por
Bion y lo define como la capacidad para tolerar la ignorancia. En este sentido
no se trata del conocimiento adquirido sino de la capacidad para tolerar la
existencia de un mundo no-conocido implicado en cada nuevo descubrimiento que
se hace.